
Éric Nado y el poder de la palabra
Transformando viejas máquinas de escribir en armas, este artista nos hace reflexionar sobre el poder de las palabras. Por violentas que puedan parecer a simple vista, estas armas no escupen balas; han sido creadas con finalidad escultórica a partir de viejas Olivetti, Underwood y otras máquinas de escribir. Su autor es Éric Nado, un escultor canadiense que se vio influenciado por un recuerdo de la infancia, en el que cada vez que su madre pulsaba una tecla de su máquina de escribir, en su cabeza resonaban rugidos de combate.