Jhon Marín

Desde muy joven, he tenido una fascinación por lo extraño y las cosas que nos provocan inquietud. En mi experiencia, el miedo tiene la capacidad de alterar nuestra percepción del mundo y de nosotros mismos. Para mí, el dibujo es una herramienta para explorar y procesar estas emociones. Cuando era niño, entendía mi entorno de una manera muy particular, a menudo influenciado por imágenes y formas abstractas que se manifestaban en mis pesadillas y sueños. Con el tiempo, esta habilidad para imaginar mundos distintos me ha permitido crear mi propio lenguaje artístico y encontrar un carácter particular. El acto de crear me permite desentrañar los códigos personales subyacentes que dan forma a mis miedos e ideas más profundas, una experiencia que considero catártica. Mi trabajo representa un esfuerzo por explorar y comprender este proceso de crear y dar a luz nuevas posibilidades a partir de materiales íntimos y personales, a menudo aterradores. Cada ser, criatura o escena que dibujo es el resultado de una exploración interna, y espero que otros puedan encontrar consuelo en mi trabajo al ver reflejos de sus propias sombras.
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