Francisco Javier Gago Arto

Siempre he sido un bicho raro, tanto, que con tan solo 12 años me lancé a la fotografía. Con tan solo 18 ya tenía un equipo reflex analógico de 35mm bastante amplio y revelaba en blanco y negro en el baño de casa. La suerte de que un antiguo profesor de dibujo técnico se ofreciese para ayudarme a ampliar mis conocimientos, han hecho que pueda tener hoy un buen nivel y conocimiento sobre el arte de capturar la luz.

La fotografía es mi pasión, aunque en realidad la utilizo únicamente como disfrute y no me dedico a ella comercialmente, ya que otra profesión llena mi nevera. Pero si que la uso para salir de la monotonía que aporta mi trabajo habitual.

Reconozco que soy un fiel admirador del retrato natural y de captar lo que sucede o las sensaciones en cada imagen.