romina dotti

Hace un poco más de 10 años que me dedico a la comunicación institucional gubernamental en un organismo técnico. Este trabajo me dio la posibilidad de desarrollar mi familia, mi economía y también me permitió conocer a personas cuya ocupación se desarrolla de manera muy sencilla y práctica. Hace unos años siento la necesidad de volver a escribir como lo hacía cuando era estudiante, entonces llegó a mi vida alguien que me daría esa posibilidad. Jorge es arquitecto y el amor de mi vida. Cuando nos conocimos se encontraba a cargo del Colegio de Arquitectos y estaba muy comprometido con la institución. Entre charlas, cenas y amigos empezamos a analizar la realidad que nos rodea, en medio de un cambio de gobierno local y de políticas urbanas para la ciudad. Y aquí estamos, desarrollando Divergente, un periódico de tinte local donde soy la principal escritora, pero donde todo se hace a pulmón y de manera colaborativa. Este proyecto es muy importante para mi, no sólo porque me gusta escribir, sino que quiero probarme a mi misma que podemos hacer comunicación social por fuera de los modos que hoy nos dominan y que generan los sentidos de mundo y de sociedad que hoy transito con mucha angustia y dolor ante tanta desigualdad e injusticia.