Tutorial Caligrafía árabe: consejos básicos para principiantes

Aprende con Joumana Medlej los aspectos básicos para escribir con este antiguo estilo de escritura árabe

Nacido durante la Edad de Oro del islam, el estilo cúfico es el más antiguo de la caligrafía árabe, apreciado tanto por sus bellas composiciones como por la armonía de sus líneas y formas.

La artista y calígrafa Joumana Medlej (@majnouna) colabora en la preservación de esta antigua práctica compartiendo el proceso meditativo que conlleva crear sus caracteres. En este tutorial, ella te enseña a trazar las formas básicas que necesitarás para empezar a construir letras y palabras. También te comparte consejos útiles para calentar tu mano y evitar errores comunes.

Materiales que necesitarás para la caligrafía árabe

Cálamo
Hay muchos tipos de cálamo que podrás utilizar. Si eres diestro, Medlej recomienda emplear un cálamo de bambú cuya punta ha sido cortada en forma recta; para los zurdos, la sugerencia es usar un cálamo con la punta cortada en forma oblicua. También podrás utilizar una pluma de metal siempre y cuando la punta sea lo suficientemente gruesa.

Tinta
Tradicionalmente, la escritura cúfica se traza con tinta ferrogálica, un material extraído de las agallas de ciertos tipos de roble. Estas estructuras tumorales están llenas de taninos, los cuales son molidos y mezclados con sales de hierro para producir una tinta que, al secarse, resulta ser a prueba de agua. Aunque dominar su uso suele tomar tiempo, lo más recomendable es emplear la tinta ferrogálica porque promueve la adquisición de buenos hábitos desde el inicio de la práctica de la caligrafía árabe. Sin embargo, podrás usar cualquier tipo de tinta negra.

Papel
La escritura cúfica no es un estilo que se pueda trabajar en formatos pequeños, así que la sugerencia es usar un folio de papel tamaño A3. Es muy importante que la superficie sea muy suave. Para ayudarte a crear formas equilibradas y parejas, puedes dibujar líneas guía con una regla y un lápiz.

Las 5 formas básicas que necesitas para escribir con caligrafía árabe

Trazo vertical
Si deslizas tu cálamo con un movimiento hacia abajo, podrás crear un trazo recto y vertical. Este elemento gráfico puede ser usado en versiones más largas o más cortas, dependiendo de los caracteres con los que lo vas a combinar.

Trazo horizontal
Arrastra tu cálamo de izquierda a derecha para crear un trazo horizontal.

Trazo oblicuo
Desliza el cálamo hacia abajo formando un ángulo ligeramente curvado, para posteriormente terminar con un trazo horizontal que pase por encima de la línea de tu papel.

Círculo
Utiliza dos trazos para formar el círculo, como si estuvieras dibujando dos paréntesis redondeados que han sido fusionados. Puedes agregar un poco de tinta en las uniones para que la transición del círculo luzca más suave y uniforme.

La cola que regresa
Crea una línea que luzca similar a una tilde (~), después extiéndela desde la izquierda para formar una curva descendente.

Calentamiento básico para la caligrafía árabe

La alif es la primera letra de la escritura cúfica, la cual a menudo se traza para calentar la mano. Además de ayudarte a ganar confianza con la técnica, escribirla también sirve como una forma de meditación.

Para hacer una alif, crea un trazo vertical y después curva ligeramente hacia la derecha.

Mientras practicas, ten en cuenta los siguientes consejos:

Mueve toda tu mano
Un error común consiste en solo mover tus dedos a la hora de crear una letra. Si mueves tu mano y tu muñeca juntas, te será más sencillo lograr líneas más fluidas.

Haz transiciones suaves
Evitar hacer tus curvas muy angulosas, pues rompen con la armonía de la letra. En vez de ello, desliza lentamente el cálamo hasta conseguir una curva suave y natural.

Presta atención a la presión
Al momento de trazar tu alif, lo ideal es que la línea final sea más delgada, de modo que resulta útil prestar atención a la posición del trazo en la que te encuentras. A medida que te acerques al final, comienza a aligerar la presión ejercida en tu cálamo.

Trabaja de derecha a izquierda
En la caligrafía árabe, los textos se escriben de derecha a izquierda, así que debes asegurarte de escribir en esa dirección mientras practicas.

Repasa tus trazos
Debido a que la punta del cálamo no puede contener mucha tinta, necesitarás remojarla frecuentemente para poder repasar y engrosar el trazo de tus letras. El objetivo es lograr líneas sólidas y oscuras.

Si quieres saber más acerca de esta antigua forma de caligrafía árabe, así como aprender a escribir textos cortos empleando técnicas tradicionales, echa un vistazo al curso de Joumana Madlej, Caligrafía árabe: descubre la escritura cúfica.

Versión en español de @art_torres_landa

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