Técnicas ancestrales, color y exploración material

Análisis profundo del color y tintes naturales en diseño, abordando su relevancia histórica y trascendencia social.

El mundo que nos rodea es un espectáculo de colores infinitos. ¿No?
Desde mis inicios como diseñadora -y, en realidad, aún más atrás como estudiante- tuve la oportunidad de estudiar el color. Sin embargo, no fue hasta hace algunos años que realmente comencé a experimentar con tintes y pigmentos naturales.
Recuerdo que, en la universidad, aprendí a armar un círculo cromático a base de óleos de 32 pastillas de color con sus transiciones, pintadas a mano.
Ese fue el inicio de mi relación con el color.

En la industria textil, revisaba cartas de tejidos e infinidad de reportes y pronósticos de tendencias. Investigaba Pantones para elegir colores de estampados, hilos para bordados y tejidos, entre muchos otros detalles.
Había mucho significado y tiempo dedicado a todo esto.

Por otro lado, comprender el color tiene que ver también con comprendernos como seres sociales y eso nos remonta al pasado.
En el vasto lienzo de la historia humana, ¡el color ha sido una paleta de expresión inagotable! Desde la antigüedad, las civilizaciones han extraído los colores más vibrantes de la naturaleza que les rodea, tiñendo telas, decorando cerámica y pintando murales e incluso con pigmentos naturales. Increíble.

En tiempos pasados, los pintores y artesanos recurrían a tintes naturales extraídos de diversas fuentes, como plantas, insectos, moluscos y minerales.
La singularidad de sus obras radicaba en la cuidadosa combinación de estos tintes naturales y en el uso de mordientes como barnices y lacas, que no solo cohesionaban los pigmentos, sino que también protegían las capas de los efectos ambientales adversos.
Estos tintes naturales no se limitaban al ámbito artístico, ya que también desempeñaban un papel importante en los teñidos de tejidos para la confección de prendas de vestir, en la industria cosmética con productos como la henna y el catecu, en la industria farmacéutica con sustancias como el azafrán y el ruibarbo, y en la industria alimentaria mediante ingredientes como el achiote, la curcumina y la cochinilla.

Volviendo a mi práctica, cuando comence a experimentar con nuevos materiales, inmediatamente incorporé tintes y la percepcion de color trabajada durante muchos años desde la teorîa pero más aún desde la intuición.

Si te gustaría experimentar con pigmentos para aplicarlos a tu trabajo, te comparto un recurso descargable que creé para mi curso. Se trata del paso a paso para crear pigmentos para utilizar como quieras ¡Espero que te resulte útil!

Y si te da curiosidad la creación de nuevos materiales, te invito a unirte a mi curso: "Creación de biomateriales a partir de descartes orgánicos" en Domestika, en donde encontrarás todo el proceso de creación inicial de materiales basados en descartes orgánicos para que puedas experimentar además de extraer el color de algunos descartes y evaluar la posibilidad de incorporarlos a tus nuevos materiales.
¡Espero verte ahí!