Rodrigo Fernandez

Ponemos en valor un arte, un oficio, una forma de vida.
Hacemos cada pieza de calzado con nuestras propias manos, con calma, mimando cada costura.
Somos de aquí, y por ello la producción se queda en casa.
A cambio de esto, conseguimos que nuestros zapatos tengan alma de cualquier rincón de este maravilloso país.
Creemos que el calzado tiene que ser una pieza perenne. De esta forma contribuimos a un modelo de consumo más sostenible.
Por todo esto trabajamos. Por todo esto estamos aquí. Gracias.