La magia del bordado: Cómo Lady Quintero convirtió un momento parisino en una pieza premiada

Descubra cómo la artista colombiana Lady Quintero transformó la inspiración de un abejorro avistado en el Parc de Bercy de París en una pieza única, combinando técnicas de bordado tradicionales, mágicas y con muñones, al tiempo que reflexiona sobre el poder curativo de crear con las manos.

Soy @ladyautonauta, una bordadora colombiana apasionada por el bordado tradicional y mágico.
En este proyecto, verás cómo por fin le di vida a una abejita que llevaba tiempo en mi lista de pendientes. Está inspirado en un abejorro que vi un día en un parque de París, tan bonito y borroso que se me quedó grabado. Aproveché la ocasión para bordarlo utilizando técnicas de bordado mágico combinadas con stumpwork para las alas.
Te invito a echar un vistazo a mi proceso creativo detrás de esta pequeña abeja bordada.

¿Puede contarnos en qué se inspiró su bordado ganador?

Una vez vi este abejorro en el Parque de Bercy, en París, y me impresionó su tranquila belleza y su denso pelaje, casi irreal. Lo observé durante mucho tiempo, posado sobre una flor, completamente absorto en la recolección de néctar, moviéndose como si bailara con el tiempo. Se le puede ver en la foto, un encuentro inesperado y precioso que se me quedó grabado.
inesperado y precioso que se me quedó grabado.

¿Cuál fue su proceso creativo, desde la primera idea hasta la puntada final?

La mayoría de los proyectos de bordado que he creado empiezan con una selección de colores que me inspiran, seguida de una decisión sobre las técnicas que quiero explorar. Así empezó también este proyecto. El proceso consta de varias etapas, desde el boceto digital hasta la preparación de los materiales.
Lo que me fascina del bordado es que me permite crear en distintas áreas. Por ejemplo, recurro a la teoría del color, la ilustración, el diseño vectorial y los conocimientos de preimpresión. Luego viene la experiencia práctica con técnicas y materiales de bordado, así como el trabajo práctico de coser. Por último, también preparo la documentación visual de la pieza, incluida la fotografía del proyecto acabado.

¿Qué técnicas y materiales utilizaste en tu proyecto y por qué los elegiste? ¿Has experimentado con nuevas puntadas, hilos o superficies?

Hacía poco que había aprendido los fundamentos del bordado en 3D, o stumpwork, y quería combinarlo con técnicas de bordado mágico y tradicional para crear la abeja. Elegí materiales de bordado muy sencillos o "básicos". Un elemento especial e inspirador fue el bastidor que utilicé para la pieza, así como la tela de organza para las alas, que añadía una sensación de transparencia.

A veces guardo objetos o materiales y espero al proyecto adecuado para utilizarlos. El bastidor procedía de un kit de bordado vintage de Royal Paris, y lo había estado guardando para el momento en que finalmente bordara una abeja. Siempre he sido una persona muy ingeniosa y rara vez siento la necesidad de tener materiales específicos o de lujo para crear lo que imagino. Intento ser fiel a mí misma haciendo lo que puedo con lo que tengo y, la mayoría de las veces, lo que tengo es suficiente.

[El bordado puede ser tanto meditativo como técnico. ¿Cómo equilibra la creatividad con la precisión en su trabajo?
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Uno de los aspectos más valiosos de aprender a bordar para mí ha sido cómo el tiempo de bordado aquieta mi mente y me centra en un proceso repetitivo. Encuentro el equilibrio cuando dejo de lado cualquier expectativa sobre lo que estoy creando y simplemente me comprometo a terminarlo. Trato de no exigir la perfección en cada puntada, comprendiendo que la precisión suele venir con la práctica y la repetición. El bordado me ha ayudado a fijarme normas más estrictas en cuanto a la limpieza con la que quiero presentar un proyecto, sobre todo en cuanto a su acabado y presentación general.

¿Cuál fue tu mayor reto al crear tu obra y cómo lo superaste? (¡Ya sea artístico, técnico o de motivación!)

Técnicamente, uno de los pequeños retos fue evitar los nudos en la medida de lo posible al bordar las alas con punto de cadeneta; no quería que se viera ninguno a través de la transparencia de la tela.
A nivel motivacional, este proyecto me enseñó el valor de intentarlo, incluso cuando no me siento emocionalmente fuerte. Últimamente no he pasado por mis mejores días, y mi estado de ánimo tiende a fluctuar. Aun así, me di cuenta de que podía elegir seguir adelante y comprometerme a crear esta pieza, que no sólo implicaba bordar, sino también documentar todo el proceso de principio a fin.

Creo que es un proyecto especial porque el bordado a veces me enseña a fluir, incluso en los días en que menos lo siento. Por eso creo que es importante reconocer que el bordado es una forma de terapia que realmente ayuda a mi bienestar mental.

Su diseño destacó: ¿qué lo hizo único? ¿Fue el concepto, la artesanía, el mensaje o algo más?

En mi opinión, lo que hizo que mi abeja bordada destacara fue la forma de hacerlo. Intenté explicar el proceso lo más detalladamente posible y lo apoyé con fotografías paso a paso. Además, creo que el trabajo con muñones da a la pieza un aspecto más
más avanzada y llamativa, aunque es una técnica accesible para principiantes como yo.

[¿Qué quiere que sienta o se lleve la gente cuando vea su obra? ¿Hay alguna emoción o idea en particular que quiera transmitir?
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Por supuesto, y me produce una oleada de nostalgia recordar una frase que solía oír en Art Attack hace años: No hace falta ser un experto para ser un gran artista. Esa es una de las lecciones más valiosas que me ha enseñado el bordado.
Hilo a hilo, el bordado me ha ayudado a mantenerme en mis cabales y a crear cosas que me conmueven o me elevan. En los últimos cuatro años, también se ha convertido en una forma de conectar con los demás compartiendo mis experiencias. Siempre intento mostrar a la gente lo mucho que son capaces de crear con sus manos, incluso con unos pocos conocimientos básicos. Todos tenemos el potencial de hacer algo, y si el bordado se convierte en una herramienta para crecer, para perfeccionar nuestra práctica o simplemente para cuidarnos, entonces ya es un hermoso éxito.

¿Cómo ha evolucionado su enfoque del bordado y hacia dónde cree que se dirige? ¿Hay alguna técnica o tema que le gustaría explorar en el futuro?

Veo progresos en mi práctica, pero aún me siento muy joven en el mundo del bordado, lejos de afirmar que lo sé todo o que soy una experta en alguna técnica específica. De lo que estoy segura es de que aprendo constantemente, y eso es parte esencial de lo que soy. Siempre me he considerado una eterna estudiante, sobre todo cuando se trata de lo que me inspira o despierta mi curiosidad.

Tengo la clara intención de asistir algún día a una escuela oficial para reforzar y validar aún más mis conocimientos. Quiero seguir estudiando otras técnicas que me interesan, porque desde que descubrí que tenía talento para crear con las manos, supe que quería seguir utilizándolas para dar vida a las cosas.

¿Qué consejo le darías a alguien que acaba de iniciarse en el bordado? Especialmente para quienes quieran convertirlo en una práctica expresiva o artística.

Es algo que también me gustaría recordarme a mí misma, porque a menudo se me olvida: todo lleva su tiempo. En esta época en la que la inmediatez está presente en casi todo lo que hacemos, deberíamos intentar buscar lo esencial: tomarnos nuestro tiempo.
La paciencia viene con eso. Bordar tiene que ver con el tiempo y la presencia, con estar aquí y ahora. Es una forma de atención plena, y es algo que construimos gradualmente. Al principio, solemos querer resultados rápidos y perfectos, pero con la práctica, empezamos a entender que esos resultados llegan poco a poco, en función del tiempo y el cuidado que invertimos.

Así que me diría a mí mismo -y a ti- que te tomes tu tiempo. No es una carrera.

Por último, ¿qué significa para ti como artista haber ganado este concurso? ¿Cómo ha influido en tu confianza, motivación o trayectoria creativa?

Es una hermosa sorpresa, un regalo de la vida y un reconocimiento a mi trabajo. Este camino no ha sido fácil para mí. El bordado llegó a mi vida durante una transición importante, no sólo como oficio, sino como forma de reafirmarme como persona, especialmente durante el cambio de país que estaba atravesando. Durante muchos años, me he cuestionado quién soy basándome en lo que hago para ganarme la vida, en lugar de quién soy en el fondo. He sido dura conmigo misma, agobiada por la frustración y las dudas que otros han proyectado en mí. Así que recibir este reconocimiento es como un mensaje: Debo de haber hecho algo bien.

Y por eso estoy profundamente agradecida a la versión de mí misma de 2021, la mujer que se sentía perdida y triste en un país nuevo, sin saber qué hacer, pero que decidió coger una aguja y empezar a bordar.

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