Aleteo de colibrí

Aleteo de colibrí

El inicio

No basta decir las cosas, cuántas miles de veces no sabe uno a quién decirlas y o gritarlas. Muchas veces la locura nos abraza, la tristeza nos arrulla en sus brazos; pero esa hermosa luz de alegría de vida y de sonrisa nos habla nos pide que volvamos a ella.

Por eso escribir se volvió una medicina, un elixir de vida. Mejor incluso que las “terapias” con humanos igual o más dañados que uno. Mejor que tantos escritos de “¿cómo vivir mejor?” que algún tipo optimista escribió, de esos que solo te dicen: “No estas bien por que no quieres. Mírame yo siempre estoy feliz”. Es ridículo, es extraño y pocos lo comprenderán, pero bueno como venia diciendo, escribir…

No pretendo salvar a nadie, no pretendo buscar la formula de la felicidad. Cada quien tiene la suya. Solo estoy plasmando en letras en frases en historias (que no son mas que ceros y unos que no es más que otro código para representar la complejidad) lo que siento lo que pienso lo que vivo y lo que sueño. En especial lo que sueño…sueño mucho.

Este es el “inicio” de algo que empece hace 10 años, cuando descubrí que en las historias podía decir la verdad. Esto es algo que quizá tuve que empezar hace mucho tiempo, pero lo hago ahora, que gracias al impulso de personas que…por alguna razón creyeron que este revoltijo de símbolos podía transmitir algo…estoy aquí, dedicando un tiempo para sentarme frente a la computadora a pasar los garabatos de una libreta, o el mensaje que nunca mande.
Admito que mucho de lo que escribo es caótico, por qué yo soy caótica. Hay cosas que corregiré para que sean gramatical, o “literariamente” correctas. Pero…muchas otras no, como esta…que siguen el paso de mis pensamientos. Por qué sí me regreso, si la corrijo y la modifico…perdería la esencia de lo que quería que fuera, perdería “mi voz”.

Así que, sobre advertencia no hay engaño…las historias son o mis delirios o mis sueños. Las fotografías son la forma en la que busco capturar momentos que necesito que se queden en mi mente, que necesito que no se borren. Y bueno, con el tiempo hay que ver hasta donde llega esto, espero que si lo estas leyendo lo disfrutes…no necesariamente que lo ames (sería lo mejor) pero si que te haga sentir algo…