Alonso Palomino

Soy diseñador gráfico de profesión pero artista de corazón. Tuve la fortuna de saberlo desde los 11 años aproximadamente, aunque he descubierto que he estado influenciado desde temprana edad. Mi primer contacto, del que tengo memoria, con el arte fue aquella extraña señora que me miraba desde un pequeño cuadrito en la mesa de noche de mi bisabuelo, la sentía tan presente que me quedaba observándola largo rato. Luego llegó el regalo del conocimiento a través de mi abuelo Fernando, de quién heredé la habilidad para el dibujo y la pintura, quien a través de sus libros sigue obsequiándome fundamentos valiosísimos hasta hoy.
Pasé por muchos talleres y cursos de dibujo, de historietas, de retrato y de caricaturas en mi ciudad natal, Lima, y hoy puedo asegurar que la mejor forma de aprender es observando "cómo se hace"; esto lo aplico en mi método de enseñanza en cada clase que dicto.
Mi obra está enfocada en el retrato y la figura humana, desde mis inicios me ha fascinado la representación de la vida a través de los rostros presentados en dibujos y pinturas; ahora comprendo que ese es mi lenguaje pictórico.
Actualmente trabajo como ilustrador, diseñador y artista independiente.
¡Ah! Casi lo olvido, la señora del pequeño cuadro que me capturó con su mirada es La Gioconda, de Leonardo da Vinci (lo supe muchos años después).