Mi proyecto del curso: Gimnasio de escritura: de la hoja en blanco a la práctica cotidiana
por Sandra Castro @castrosandra33
- 221
- 9
- 2
Escribí este texto con la estrategia "¿No sabes lo que pasó?", luego de recordar "una experiencia propia vivida en el día".
"Hoy me levanté sin ganas de hacer nada. Hace mucho tiempo que tengo esta sensación. Después de comer pensé en retomar una vieja costumbre: dormir una hora de siesta y luego ir a caminar al Parque. La primera no la hice, la segunda sí. Me fui con la bici al Parque, pero entré caminando. Hice una vuelta corta, de las que hacía siempre, y cuando me disponía a realizar la segunda, vi el alambrado bajo del laberinto. ¡Se podía pasar!!, ¡No había animales dentro!! … Y me metí, escondiéndome de Pochito, que andaba por ahí haciendo cosas... No quería soportar las miradas inquisidoras de nadie.
Cuando comencé a caminar por el sendero, recordé a Mario trabajando para trazar el laberinto con el machete y la guadaña, el calor del verano y los mosquitos del humedal. Pensé en las cosas que Mario ha hecho por mí, ¡Algunas inverosímiles!. Reconocí algunos de los viejos lugares que Mario había demarcado con la máquina de cortar césped. Traté de explorar "las pasadas temáticas" - árboles, árboles antiguos, arbustos, hierbas, aves, animales- Intenté recordar los sitios donde paraba con los turistas cuando realizaba la visitas guiadas. El espacio era el mismo, pero todo había cambiado: faltan muchos árboles y arbustos. Las hierbas se hayan pisadas por el paso de la hacienda. Ya no es el bosque oscuro que daba cobijo a infinidad de aves. Ya no es el bosque oscuro que energizaba el alma. No es ni sombrío ni secreto, pero conserva cierta intimidad dentro del ambiente general del Parque.
Me faltaba algo, y en el momento creí, que era el tiempo que había pasado. Los cambios que percibí en el lugar. La luz, demasiada luz para esa zona que otrora era mágica. Salí del laberinto, sin tomar nada. No encontré las orquídeas. Tampoco estaban, son muy sensibles. Salí del Parque.
Tomé mi bici y volví a casa. Me faltaba algo, no sabía qué. Cuando llegué a casa reconocí que me faltaba Silas, guiándome dentro del laberinto, recorriendo nuevos senderos, esperándome cuando me atrasaba al caminar, refrescándose en verano, desperezándose en invierno. Era 13 de julio. Su aura albina está en todos los rincones de ese bello lugar, recordándome lo importante que ambos, Mi mascota y el Parque, fueron en mi vida.
2 comentarios
aniko
Profesor PlusHola @castrosandra33,
Muchas gracias por compartir este texto, qué lindo homenaje a Silas. <3
Me gusta mucho esta reflexión: "Me faltaba algo, y en el momento creí que era el tiempo que había pasado."
Como lectora me quedo con ganas de saber cuáles son esas cosas inverosímiles que hizo Mario por vos, y también si el 13 de julio es una fecha que represente algo específico.
¡Gracias por compartir!
castrosandra33
@aniko El 13 de julio se cumplió un año que murió mi perro. Y las cosas que hizo Mario son muchísimas, pero en el caso particular del Parque Idoyaga Molina, en este sector de reserva agreste, abrió a machete y a hacha, un sendero de 2 km. que utilizaba para pasear visitantes y turistas. Y otras cosas mas personales. pero esa, es otra historia...
Entra o únete Gratis para comentar