El wet felting es una técnica textil artesanal que compacta la lana con agua caliente, jabón y fricción para piezas firmes y con acabados únicos. Un factor crucial para el éxito es el cálculo preciso de la contracción o encogimiento de la lana. Si se ignora este paso, los resultados pueden ser medidas incorrectas, desperdicio de material y acabados poco profesionales. Para facilitar este proceso, Domestika ofrece un recurso gratuito en PDF que detalla un método sencillo y exacto para calcular la contracción. ¿Qué es el encogimiento en el fieltrado húmedo? La contracción en el fieltrado húmedo se refiere al cambio de tamaño y densidad que experimenta la lana durante el proceso. A medida que las fibras se entrelazan y compactan, la pieza reduce sus dimensiones. Por ejemplo, un proyecto que comienza con una superficie de lana de 30 x 30 cm puede terminar con unas medidas finales de 25 x 25 cm. Esa merma es significativa y conviene anticiparla para planificar cada pieza correctamente. Por qué es importante calcular la contracción Calcular el encogimiento antes de empezar un proyecto de fieltrado húmedo es fundamental por varias razones: Evitar errores en medidas y proporciones. Te aseguras de que tu pieza final tenga las dimensiones correctas. Optimizar materiales y tiempo. Ahorras lana y evitas repetir el proceso por falta de previsión. Conseguir acabados más profesionales. Al dominar la técnica, tus creaciones tendrán un aspecto más cuidado y preciso. El recurso gratuito de Domestika: PDF descargable Para que puedas aplicar este conocimiento, Domestika ha creado una guía en PDF gratuita que explica paso a paso cómo calcular la contracción en el fieltrado húmedo. En ella encontrarás: - Explicaciones claras y sencillas. - Ejemplos prácticos. - Pasos detallados para realizar tus propios cálculos. Lo mejor es que este material proviene directamente del curso Mastering Wet Felting: Create Decorative Wool Items, impartido por una experta en la técnica.
@paulaerodriguez_1
Diseñadora de interiores
Buenos Aires, Argentina
Quizás nunca los tenga, a ver qué pasa. Estemos atentos.
