Andiie Hernández

Ilustrador ante todo, si no me lo hubiesen prohibido hoy sería otra persona. De pequeño disfrutaba dibujar y desarmar todo lo que tenía a la mano. Con el tiempo empecé a escribir, me mal influenciaron los cómics, los poetas malditos y mi amor por la guitarra. No le prestaba atención a nada más. Deserté de las malas enseñanzas y encontré mi camino en las artes digitales, conocí el vínculo entre el carbono y el silicio y otro uso para el lenguaje, que las imágenes sí valen más que mil palabras, pero sin palabra no importaría nada más. Desde el más pequeño punto hasta un hiper cubo de 10 dimensiones. Me obsesiona el tiempo y lo que percibimos de éste, el movimiento y el fotograma; lo real y la ilusión y viceversa, pero sobre todo me apasiona el error, lo aleatorio y lo impredecible.