Monstruos de agua

Diseño de personajes para el cómic: Monstruos de agua

En milenarias aguas de los canales Xochimilco habita un peculiar ajolote, un monstruo acuático, místico y prodigioso, quien junto a sus amigos: otro ajolote marcado por la crueldad del hombre, un pollito mutante y con muy mala suerte que nació con manos en vez de alas y una carpa cuyo poder de voluntad y tenacidad lo hicieron evolucionar, recorrerán las indómitas tierras que rodean a los tóxicos canales y descubrirán que existen más monstruos de agua de los que imaginaban.

La protagonista principal es una ajolote llamada Kuali, quien no recuerda nada de su pasado y fue arrastrada de un idílico lugar secreto hasta los canales de Xochimilco en una noche tormentosa. Ella puede regenerarse, como cualquier ajolote, además de transformarse en diferentes animales o plantas, pero la forma que elige tomar la mayor parte del tiempo es la de un ser con rasgos humanos parecida a un “hada”.

Opia es otra ajolote, ella fue criada en cautiverio y nació sin su ojo izquierdo, en el cual tiene una canica, regalo de Kuali. Fue desechada por no ser “atractiva” para las personas que visitaban la tienda de “mascotas” donde nació. Debido a la degeneración genética que posee no sabe si puede regenerarse como cualquier ajolote, por lo cual es muy cuidadosa y desconfiada. Tiene la capacidad de transformar su cuerpo en un ser humanoide, al igual que Kuali, pero no puede tomar otra forma a parte de ésta.

Pil, nombrado así por Kuali, es un pollito mutante con brazos y manos en vez de alas, el cual nació en una granja y fue elegido para realizar una “limpia”, el cual es un procedimiento cuya función principal es, como su nombre lo indica, quitar, sacar, extraer aquello que está generando algún malestar, desequilibrio o enfermedad. Debido a esto, está cargado con “mala suerte”, lo cual lo pone en peligro en un sinnúmero de ocasiones.

Michin, apodado cariñosamente “Patitas” por Kuali y Opia es una carpa habitante de los canales, quien según él, harto de vivir constantemente enfermo por la contaminación fluvial y de ser cazado, comenzó a mutar y a desarrollar extremidades humanoides con pura fuerza de voluntad y tenacidad, por lo cual perdió las agallas y ya no puede respirar bajo el agua. También tiene la habilidad de brillar en la oscuridad.