Impresiones personales

chicos... que el 3D es un vasto océano por el que bucear está sobradamente demostrado gracias a la creciente tecnología que se supera exponencialmente año tras año. Todavía no nos es posible trabajar a tiempo real con cálculos de radiosidad (jeje) y hacer animaciones con este tipo de render es un lujazo que el grueso de los clientes no está dispuesto a pagar. Creo que todavía estamos atados a la tecnología, y nos preocupamos más de los tiempos de render, de poner o quitar sombras, de añadir o eliminar cáusticas o iluminación global, y en general, de optimizar recursos (geometría, interacciones, etc) que acaban haciéndote esclavo al servicio de la técnica con la que debes ser creativo. En mi opinión, hay tres tipos de usuarios de ordenadores:

1.- informáticos: fundamentalmente técnicos preocupados todo el tiempo de toquetear las tripas de sus ordenadores y configurar, desconfigurar, reconfigurar, instalar y desinstalar programas... su tiempo se consume feliz en esta actividad. (suelen ser PCeros)

2.- creativos (no me refiero al parásito con corbata que regenta una agencia de publicidad): su preocupación es prácticamente artística, no comprenden muchas veces lo que pasa ahí dentro de esa maquinita tan cara, pero que con ella pueden pintar, cortar y colorear lo que su imaginación y talento es capaz de ver más allá de una pantalla... (suelen ser de todo menos PCeros)

3.- el artista 3D: un espécimen prudentemente conocedor de la técnica (en ocasiones, a la fuerza) evitando ser abducido por el reverso oscuro... a fin de que ésta no interfiera en su creatividad (suelen conformarse con cualquier sistema que les garantice estabilidad y potencia)

...es entonces que empiezas a andar sin darte cuenta por la cuerda floja... a un lado de la pértiga, la productividad... y en el otro lado de equilibrio, el deadline. Estamos en un mundo ficticio, tiempo es dinero... pero ay... qué bonito sería poder volar... jeje

NECESITO UN RAID DE PROCESADORES!!!!

uf...

creí que no sería capaz de decirlo :)))

isra.