Historia del Bordado: de Tutankamón al siglo XXI
Antes de que las máquinas lo relegaran al hogar, el bordado fue un lenguaje que nos ayudó a entender el mundo
¿Cuándo empezó el bordado? ¿Y dónde? Aunque parecen simples, estas preguntas son muy difíciles de contestar. Ejemplos de bordados se han encontrado en todo el mundo, en culturas muy diferentes, y sus técnicas y puntadas se han mantenido constantes a lo largo de los siglos. Es un arte intrínsecamente humano y cultural que ha perdurado en el tiempo para resurgir con fuerza en los últimos años.
Tradicionalmente, se ha asociado el bordado con el mundo “femenino”. Esta consideración lo relegó al papel de pasatiempo a los ojos de la sociedad, pero a la vez lo convirtió en algo íntimo: una técnica a través de la cual la historia se ha transmitido en secreto. ¿Quieres conocer su historia? Descúbrela en el siguiente vídeo.
Un arte milenario y global
El objeto bordado más antiguo que se conserva fue encontrado, sorprendentemente, en un lugar rodeado de misterio, mitos y leyendas: la tumba del faraón Tutankamón.
Pero ese no es el único descubrimiento antiguo. En el continente americano, miles de años antes de los grandes imperios, ya se trabajaba el bordado, como demuestran los hallazgos en una necrópolis de la costa peruana.
Cuando la dinastía Han, en China, expandió sus rutas de comercio por Asia Central y estableció la Ruta de la Seda, el comercio de este codiciado y preciado material creó un intercambio cultural que quedaría plasmado en los bordados de la época: los patrones chinos se mezclaron con el arte persa y árabe, creando un lenguaje universal que se escribía con motivos florales y patrones geométricos.

En Francia, el bordado se utilizaba para decorar los bordes de las prendas, pero su uso no se limitó a la vestimenta, sino que fue también un medio para inmortalizar la historia. Es el caso, por ejemplo, del tapiz bordado más antiguo que se conserva: el tapiz de Bayeux, 70 metros bordados que conmemoran la batalla de Hastings.

El bordado como marca de estatus social
El minucioso trabajo de bordar patrones en la ropa era muy valioso, así que eran los ricos y poderosos los que vestían telas bordadas para mostrar su estatus social.
Los maestros anglosajones crearon el Opus Anglicanum, una mezcla de hilos de oro y plata con terciopelo, reservada para objetos religiosos y sagrados. El bordado con metales preciosos se convirtió en símbolo de poder.
No obstante, la reina Catalina de Aragón, primera esposa de Enrique VIII, introdujo en Inglaterra el bordado blackwork, un estilo de bordado monocromático cuya belleza radicaba en su complejidad y elegantes patrones, no en su aspecto brillante y ostentoso.

No siempre un signo de riqueza y opulencia
Aunque el bordado era en muchas ocasiones y culturas una marca de estatus y poder, esta disciplina también se puso al servicio de la gente más humilde. Por ejemplo, el huipil mesoamericano, caracterizado por sus coloridos diseños, era una prenda común en todas las clases sociales.

Por otra parte, muchos otros estilos de bordados tradicionales surgieron por cuestiones prácticas, como el Sashiko japonés, que era, en su esencia, una forma de remendar las prendas rotas a través del bordado.
Estos bordados, que no vestían a los reyes, ni decoraban las iglesias, ni utilizaban oro o sedas, formaban parte de la cultura de cada lugar y su tradición se transmitía de generación en generación hasta convertirse en legado cultural. Más allá del lujo y la ostentación, el bordado era una seña de identidad.

La llegada de la industrialización y los telares
La llegada de la industrialización afectó el mundo del bordado. El telar de Jacquard (un telar mecánico inventado por Joseph Marie Jacquard en 1801) tejía complejos patrones de brocado y damasco con un sistema de tarjetas perforadas, precursoras de los primeros sistemas de datos usados desde los telégrafos hasta los primeros ordenadores. Esta máquina revolucionó la industria y aceleró la producción de bordados que, hasta ese momento, eran trabajos minuciosos y muy laboriosos.
Más adelante, la máquina de bordado Schiffli (1863) completaría el proceso de automatización, hasta que las manos dejaron de ser necesarias para bordar.

Progresivamente, las máquinas se impusieron en todo el mundo y el bordado manual quedó relegado al entorno doméstico, pasando a formar parte de la larga lista de cualificaciones que caracterizaban a la considerada “esposa ideal”. Pero bordar ofrecía un espacio de expresión personal y artística donde muchas mujeres imprimían su propio sello en los objetos que les rodeaban y creaban sus obras de arte.
Los cuadernos de patrones y motivos facilitaban el aprendizaje de la técnica y se practicaba haciendo muestrarios. Algunos incluían versos de la Biblia, refranes, o reflexiones personales que reflejaban la evolución de la mentalidad y los cambios sociales de la época.

La nueva ola de bordado
Las primeras olas de feminismo rechazaron los roles impuestos durante siglos y los avances tecnológicos, la invención de fibras sintéticas y el minimalismo del mundo moderno provocaron un desinterés por el bordado, que pasó a considerarse cosa del pasado.
No obstante, después de décadas de avances tecnológicos, en que la industrialización ha convertido los objetos y sus diseños en reproducibles y comunes, crear algo con las manos es un acto radical. En la última década, bordar ha vuelto con fuerza y ha recuperado su lado más contestatario. Nos permite crear piezas únicas, auténticas y personales con nuestras propias manos. Y a pesar de que lo que plasmamos siga la estética del momento, estaremos utilizando la misma técnica que ha escrito, desde tiempos inmemoriales, siglos y siglos de historia.

Te puede interesar
- 'Técnicas avanzadas de bordado: puntadas y composiciones con volumen', un curso de Señorita Lylo.
- 'Introducción al bordado en blackwork', un curso de Gimena Romero.
- 'Introducción al bordado en relieve', un curso de Adriana Torres.
10 comentarios
daniela201074
Maravilloso!! Me pueden recomendar libros sobre historia del bordado. Gracias
maraschedler
Sou apaixonada pela arte ela é sem dúvida um grande conhecimento da antiguidade e veio para nos incentivar ao desenvolvimento de todas as conexões de nosso cérebro . O Bordado é uma forma têxtil de comunicação com o belo
sagiro
Extraordinario, felicidades por esta investigación, sus cursos de bordado también buenísimos🥰
a__sadallah
Muy interesante la historia del bordado muchas gracias por la información.
lisyrobaina
Hermosa reseña historica del bordado.. gracias♡
claudiatrujillodemenjivar
Excelente curso maestra, me fascinò, espero nuevos cursos.
isabeluribemoya
PlusHermoso video. Un gran resumen del intrincado mundo del bordado. Despierta el deseo de aprender más y más
mavitzzz
Que buen material… gracias!
laura_muriel
@mavitzzz ¡Muchas gracias por tu comentario! :)
marcelalibuy
Excelente aporte, muchísimas gracias.