15 razones para usar un sketchbook por Sergio Bleda, Miguel Gallardo y Puño

Hablamos con tres profesionales de la ilustración para que nos expliquen sus motivaciones para usar un cuadernos de bocetos

Sergio Bleda (@sergibleda) es un historietista e ilustrador profesional de Valencia (España) y en su curso “Técnicas de entintado para cómic e ilustración” explora las posibilidades técnicas y creativas del entintado. Además, es un enamorado de los cuadernos de bocetos y nunca se despega de los suyos.

Para él, su trabajo consiste en traducir conceptos a imágenes para que estos pasen de ser una concepción abstracta a convertirse en algo legible, y para ello el cuaderno de boceto es su herramienta fundamental. Aquí sus 5 razones por las que poner un sketchbook en tu vida:

#1

Lo que nace en el cuaderno de bocetos es lo que él define como un torpe “balbuceo gráfico”: un pequeño paso que te hace perder el miedo a lo desconocido. La primera palabra de una nueva lengua.

#2

Te permite trabajar sin presiones y libremente porque a veces lo que dibujas ahí lo haces sin saber del todo lo que buscas, pero sabiendo al menos lo que no quieres encontrar.

#3

Permite la insistencia y da alegrías cuando a veces, sólo a veces, quizá al segundo o al tercer, o al duodécimo intento, logras dibujar exactamente aquello que el cerebro expresó en su propio idioma y el hombro, el brazo y la mano supieron traducir para que tus ojos y el resto de ojos del planeta comprendieran completamente.

#4

Es solo para ti a para quien tú quieras: no los hacemos para que sean admirados y, aunque algunos sean admirables, la mayor parte de las veces nadie, a parte de nosotros, los verá ni los juzgará. Y eso les permite ser tan libres o alocados como haga falta.

#5

Es el primer paso de algo grande: los hacemos por el mismo motivo por el que los agricultores plantan semillas, para que se conviertan en árboles enormes y maravillosos, sus hojas nos den sombra, su tronco cobijo y su fruto alimento.

Miguel Gallardo (@gallardo) es un reputado historietista español; la mayoría de sus trabajos pertenecen al cómic underground. Además, es profesor del curso “Narrar viñetas con un boli” en el que enseña a construir el relato de un cómic a partir de una experiencia personal. Para él, un sketchbook también es imprescindible y estos son sus argumentos:

#1

No hay excusa para no tener uno, todo sirve y son muy baratos.

#2

Puedes usarlo para más cosas que para bocetar, garabatear o dibujar.

#3

Es útil para llevarlo encima siempre y anotar tu día a día.

#4

Incluso si cambias de país o continente. Los cuadernos de bocetos no conocen de fronteras.

#5

Te permite recordar todo lo que quieras recordar.

Puño (@puno) es un dibujante profesional de referencia y es otro de los grandes enamorados de los cuadernos de boceto como enseña en sus cursos "De principiante a superdibujante", "Dibujo para principiantes nivel -1" o “Ilustración original de tu puño y tableta". Estas son sus cinco razones para no despegarse de su sketchbook:

#1

Los cuadernos son sucursales de nuestro cerebro: tener un archivo real donde almacenar nuestras ideas nos permite tener la cabeza libre para fabricarlas.

#2

La ideas necesitan de una forma física, si están en nuestra cabeza solo son ocurrencias.

#3

Plasmar gráficamente una idea en sus primeros momentos de vida nos permitirá deducir si es viable o no, y ahorrar así muchos recursos mentales invertidos en su desarrollo.

#4

Un cuaderno no solo es un archivo: es un jardín, es una bodega, es un un ayudante y en ocasiones una boya de salvamento.

#5

Si hemos tenido éxito, nuestros hijos los podrán vender a algún museo; si no, el papel es bueno para calentarse en invierno.

Si quieres descubrir otros cuadernos de bocetos increíbles, no te pierdas el de José Naranjo sobre viajes.