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Dos de las marcas de telecomunicaciones más potentes de Austria - uno centrado en el negocio móvil, el otro en la línea fija – se dieron cuenta que se estaban canibalizando entre sí y decidieron fusionarse. Dos empresas de gran éxito en el mismo sector y muy similares en cuanto a ofertas de productos, pero con culturas muy diferentes. Saffron fue contratada para ayudar con el proceso de fusión y con la creación de una nueva estructura de marca para la nueva compañía. La solución fue una idea de marca - "Alles wird eins" o, en español, "Todos somos uno”. La solución visual refleja la diversidad de la vida de los clientes y los diferentes requisitos que tienen de su proveedor de telecomunicaciones, cambiando constantemente pero manteniendo la misma forma. Ver más aquí.