El enano que colgaba de mi puerta
von Jorge Ramos @jorge_ramos
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“Llegué por la noche tras un día duro de trabajo, y entré en la habitación. Cerré la puerta dispuesto a tirarme en la cama a descansar, pero justo antes de cerrar la puerta, una voz ronca y malhumorada dijo:
-¡¡Eh, ten cuidado!! Casi me pillas los dedos.
Yo por culpa del susto me caí sentado sobre el suelo, y entonces fué cuando le ví. Colgado de la parte alta de la puerta había un personajillo de corta estatura, calvo pero con el cuerpo peludo y vestido tan sólo con unos pantalones deportivos y unas botas de fútbol.
Tras decir esto, se descolgó de la puerta y cayó de pie delante mía, mientras yo estaba aún en el suelo. Me miraba fijamente, con cara mal humorada y con los brazos en jarra.
Tras unos segundos mirándome, conseguí balbucear algo:
-¿Qui...quién eres?-le dije con una voz temblorosa
-Veo que no sabes por qué estoy aquí-dijo el misterioso enano-se te olvidan pronto las cosas cuando no te interesa.
Tras este comentario puse cara de extrañeza, y el volvió a dirigirse a mí:
Si si....hazte el despistado, pero vengo aquí para darte una pequeña lección.
¿Lección? ¿Una lección sobre qué?- le contesté- si no te marchas en seguida de mi casa llamaré a la policía.
¡Ja! - se rió el enano - la policía no tiene nada que hacer contra mí, ni ellos ni nadie – dijo-los enanos de las puertas no somos gente corriente, somos duros como piedras.
¿Los enanos de las puertas? - pregunté.
Sí, los enanos de las puertas. Colgamos detrás de las puertas de la gente que ha cometido un acto egoísta, y entonces cuando menos lo esperan.... ¡¡ les pateamos el culo con nuestras botas de fútbol !!
Pero yo no he hecho nada para tener que recibir una patada, de hecho soy bastante generoso.
¡¡Mentiroso!! - gritó el enano - mira, no tengo mucho tiempo así que te lo diré rápido: esta mañana en el trabajo te reíste junto con los demás, cuando la becaria se tropezó y cayó al suelo. A estas alturas todos tus compañeros de trabajo deben tener el culo bien rojo.
¡¡ Pero yo no me reí de ella, lo juro !! - le supliqué
¿Qué te crees que no te ví? -contestó- Todos tenéis un enano vigilándoos. Cuando menos os lo esperáis, viene a pediros las cuentas. Esto me recuerda a que tenía un trabajo pendiente contigo......
Lo demás no lo describiré porque me duele sólo de recordarlo, pero puedo aseguraros que me he tirado varios días sin poder sentarme. Todo lo ocurrido es cierto, así que la próxima vez que penséis en hacer algo malo, penséis en el enano que os vigila, llevan unas buenas botas de fútbol....”
Aquí os dejo unos bocetos del proceso por el que pasó el personaje hasta que quedó como me gustó. Perdonad la mala calidad de las imágenes pero no tenía medios mejores.
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